Día a día surgen diversos problemas en las aulas de secundaria. A pesar de ello, existen diversas soluciones para atajarlos y evitar que vuelvan a producirse. En esta publicación, se van a tratar cuatro problemas que pueden surgir en las aulas, con sus correspondiente soluciones.
En primer lugar, en ocasiones, surgen problemas en cuanto al aseo y a la apariencia personal de ciertos alumnos. Por lo tanto, debe crearse un código de vestimenta que evite la muestra de ideologías políticas u otro tipo de ideales que puedan resultar dañinos para el resto de compañeros o para el personal educativo. Además, ante la falta de aseo de los alumnos, se analizarán las causas de dicha carencia para poder examinar posibles soluciones. En primer lugar, se avisaría a los padres y si la falta persiste, se trasladaría el caso a los servicios sociales.
En segundo lugar, la manipulación de alimentos o la modificación de los mismos utilizando el material escolar o material del centro como los radiadores para calentar la merienda durante las horas lectivas, se penalizará con la retirada de la merienda ya que no se permite colocar comida en los radiadores.
En tercer lugar, existe en muchas ocasiones falta de atención e interrupción de la clase por parte de los alumnos. Para evitar o atajar este problema, el profesor invitará al alumno a participar en la función del profesor. Éste alumno explicará algún concepto delante de sus compañeros para que que se sienta integrado en la clase y recupere la atención y el interés por la materia.
Por último, la alteración o modificación del mobiliario del centro se solucionará con un escrito de cada uno de los sospechosos implicados en la acción para relatar el problema. Este escrito será anónimo por lo que los implicados terminarán acusando al verdadero culpable.
En conclusión, no existe problema que no tenga una factible solución.
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